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Proceso Electrozincado

El proceso de cincado, o electrozincado, es un proceso en el que se adhiere una capa de zinc al acero para protegerlo contra la corrosión.
 
El electrozincado es el método de recubrimiento electrolítico de acero más utilizado. Este proceso de recubrimiento garantiza una protección razonable contra la corrosión y una apariencia agradable de las piezas a un coste bajo. El recubrimiento también se usa para mejorar las propiedades de corrosión y la persistencia de la pintura.
 
Se lleva a cabo en frío mediante electrolisis, la capa de cinc depositada sobre las piezas oscila entre las 5 a 25 micras y se usa cuando se requiere una resistencia menor a la corrosión y una fortaleza mecánica menor, y unas mayores cualidades estéticas. Por eso se usa especialmente en aplicaciones de interior o proceso previos a pintura para darle una mayor protección.
 
Consiste en aplicar zinc a la lámina de acero y decapar por electrodeposición. A diferencia de otros revestimientos de zinc, como el pintado con zinc, el proceso de zincado es continuo y el espesor del revestimiento es mínimo, e igual que el galvanizado, implica una serie de baños y enjuagados antes del baño de zinc.
 

Las fases del proceso de zincado

En el proceso de zincado se aplica una capa de zinc utilizando corriente eléctrica. Para ello se utiliza un baño electrolítico de zinc con dos electrodos: un ánodo (polo positivo) y las partes de acero que se recubrirán de zinc como cátodo (polo negativo), a las que se aplica corriente.

electrocincado
El zinc disuelto también se incluye en el baño, y se introduce como un concentrado a través de bombas dosificadoras, agregando una sal conductora, generalmente soda cáustica (hidróxido sódico/NaOH), para aumentar la conductividad. Bajo la influencia de la corriente eléctrica, el zinc que se disuelve en el baño (Zn2+) se reduce en el cátodo, y luego se deposita gradualmente en la superficie del componente de acero
 
Durante el proceso de zincado, los iones de zinc presentes en el cátodo recogen electrones y posteriormente se depositan en el componente como zinc elemental:
 
Zn2 + + 2e¯ → Zn
 
La calidad del recubrimiento de zinc depende de que todas las fases se ejecuten correctamente, es muy importante desengrasar y decapar muy bien el material base para lograr el mejor acabado.
 
El proceso se realiza con un baño de zinc libre de cianuro y respetuoso con el medio ambiente, es muy importante que los componentes a revestir estén libres de impurezas, una vez recubierta la pieza con su capa de zinc se protege mediante un pasivado y un sellado adicional si se requiere. pasivación.
 
Estos baños son: 
1. Desengrase químico
2. Decapado Acido
3. Desengrase químico
4. Baño de zinc alcalino
5. Baños de enjuague 
6. Pasivado  
7. Sellado
 
Entre cada proceso se intercalan varios lavados y prelavados para no arrastrar ni contaminar cada uno de los procesos.
 
Para obtener una excelente calidad del producto, es importante asegurarse de que la composición de los numerosos baños permanezca dentro del rango especificado. Incluso una pequeña diferencia con respecto a la ventana de proceso puede reducir significativamente la calidad y provocar un mayor número de rechazos.
 
Se pueden utilizar diferentes métodos de recubrimiento en función del tamaño de las partes metálicas a recubrir. Se requiere un buen flujo de corriente durante el proceso de zincado, por lo que las piezas más pequeñas se cincan en tambores, mientras que las piezas más grandes se cincan en estátic

 

Principales ventajas del zincado

El zincado se usa especialmente en interiores y en otras aplicaciones que no requieren la durabilidad del galvanizado, porque supone:

 

- Una capa de zinc extremadamente delgada y uniforme que no recrece la pieza en exceso y no impide futuros montajes.

- Es una capa electrolítica, forma parte de la pieza , no salta , se puede doblar, plegar sin perder la protección.

- Un coste económico no muy elevado.

- Acabado estético y uniforme que junto con el pasivado final se pueden conseguir diferentes colores

 

Usos del proceso de zincado

El proceso de zincado puede encontrarse en multitud de aplicaciones de nuestro día a día, empezando por las puertas, bisagras, tornillería, tubos, herrajes diversos y multitud de piezas en el interior de electrodomésticos, maquinaria etc.
  •  - Industria de la automoción:  partes y componentes del motor, toda la tornillería y fijaciones, así como partes de ensamblaje
  •  - Construcción y arquitectura: puertas, ventanas, vallas, rejas, piezas y aplicaciones de interior en general que se quieran proteger contra la corrosión con una mejor apariencia estética.
  •  - Dispositivos de fijación: tornillos, tuercas, arandelas, bridas.

 

Normas aplicadas

  •  - Revestimiento uniforme.
  •  - Es adecuado para piezas de pequeño tamaño.
  •  - Se rige por los estándares UNE EN 12329 (discontinuo) y PNE-Pr EN 10152 (continuo)